Un wiro en Puerto Vallarta

De la aclamada serie Un wiro en... Donde contamos las peripecias y vicisitudes de este su humilde servilleta por sus viajes al rededor del mundo (uuuta si ni de Norteamérica he pasado...) ahora le traemos la deslumbrante historia donde nuestro pobre wiro yucateco con guayabera y pañoleta se aventura a cruzar casi todo el país gracias a su sacrosanto trabajo que lo obliga a sufrir las más imperiosas condiciones laborales y poder remojar su chancleta en las aguas del Pacífico.

Y mira que a ni está tan calmado el wey por que habían unas olas que no mames... Así yo no me meto al mar, pero eso es más tarde.

Lo primero que un sujeto como yo puede hacer cuando va a un lugar nuevo, es hacerse la pregunta máxima obligatoria de cualquier gente decente que se digne de tomar un buen trago: Y aquí... ¿en donde voy a tomar los tragos?. Pues aquí este su servilleta se puso a investigar acerca del "nait laif" de Vallarta y se topó con que quesque es poca madre y mis huevos son de acero... Y mira, ahí vengo a encontrarme con el Constantini Wine Bar. Nota mental: hablar de mi nueva afición un día de estos.

Vacilando por el website, me encuentro con que los jueves hay catas gratuitas ofrecidas por el restaurant... Y como este wiro ya no quiere ser tan wiro y mucho menos un wiro pendejo, ahí se fue de gorra café a degustar unos vinitos de la casa mexicana Monte Xanic. El Chenin Blanc, pasa; el Grenache, pasa pero sangre; y el Syrah simplemente está de no mames... Y eso que mi paladar aun no ha brincado a los más fuertes pero de que está bueno, lo está. El lugar, muy chingón... Algún día me gustaría tener uno así... Nah, la verdad es que a una como Susan, pero en fin...

Y mira, ahi ta el marecito... Ustedes disculparán la mala calidad de la foto, pero la lumix se quedó sin batería y como aún no he encontrado el cargador por que a sugerencia de una de mis hermanitas ya había empacado todo para mudarme, me pelé un cuarto kilo de camote.

Pues que más... Ahí va uno caminando por el malecón, la gente muy tranquila, de diferentes razas y lugares de origen, que si hay gringas, italianas y locales, gente muy bonita (no, Fredd, no hubo fotos de culos) y ahí va uno dándose cuenta de que casualmente, es el trigésimoquiensabecuanto aniversario de la fundación de Vallarta como Pueblo. Mira nomás; Jorgito siempre presente en los grandes eventos (aunque sea de cagada).

Y mira tu... Que con motivo de la misma chingadera nos pusieron a volar a los voladores... Que chingón... Ahí en mi tierra los voladores los asientas en el suelo y le prendes candela para que haga pum y estalle ahí ariba... Jam...

Y por ahí andaba pastoreándose Jorgito en el malecón de Vallarta... Viendo mujeres, conociendo el lugar, empapándose un poquito del folklore y comprándole unas playeritas a mis hermanitas por que las muy lindas y hermosas siempre preguntan "que me trajiste?"... Bah... Como si se lo merecieran, pero bueno... Ahí iba uno caminando y dando un rol cuando se topa de repente con que en una tienda de esas de artesanillas y chácharas comercializan un producto regional de la región de Jalisco:

Ay no me arranquen el pellejo... Le pregunto a la vendedora "oyeme hija... Y este picante es típico de por aquí?" y me dice "siiiiiiiiiiii"... Uta... Habría que preguntarle a Príamo... Pero en fin... Ahí cada quien con sus creencias.

Pero no hay pedo... Como todo en la vida, siempre hay su lado no tan bueno y su lado de poca madre. Admirad la foto del Chili's donde fue Jorgito no a jugar sino a almorzar (por que si digo comer me pueden botanear).

Desafortunadamente, no tuve mucho tiempo para pasear por Vallarta. Me encantó la vida nocturna e incluso por ahí me fuí al Hard Rock (del cual les dejo un videito más abajo). ¿la playa? Honestamente chavos, está mejor la de Chelem y la de Chicxulub en Septiembre, mejor ni les cuento por que se me caen los calzones. Y si me voy a cuestiones caribeñas mexicanas, ahí si que bajan su calcetín y se me ponen viendo al zócalo las playas del Pacífico.

Pero si, ahí anduve paseando el domingo antepasado, la vista, impresionante y salvo la vida nocturna, no creo que me llame la atención echarme unos 4 baros de avión por ir tan lejos a tomar los tragos... Mejor hago un pedazito de mi barda y ahí les invito a brindar cuando terminemos la obra, ¿o no?

El video del Hard Rock Vallarta:



Escuchando: Piel de azucar; José José (uta si... díganme José José, me vale madre)