miércoles, 19 de agosto de 2009

De visita al Gallinero

Ah... El maravilloso Gallinero, conocido otras veces como el nido de la Güila, el coloso de Santa Úrsula, el Guillermo Cañedo de la Bárcena y más famósamente, como el Estadio Azteca.

No me mal entiendan amigos míos. Se le tiene mucho respeto a tan colosal y monumental estructura... Que no por eso dejará de ser el gallinero de unas aves sin plumas y jodidas, entendámoslo.

Pues ahí merito me encontraba el pasado miércoles 12 (hace una semana ya) a eso del medio día en la excursión pirata que contraté para llegar "tranquilamente" a esos lares de la calzada de Tlalpan. Luego les cuento por que pues lo primero, es indudablemente lo primero.



Creo que habré llegado al estadio por ahí de las 12 del día. Aun no había mucha gente pero pues, eso fue bueno por que pude agarrar un lugar no tan jodido, digo, y eso que pensé por un momento en irme debajo de alguna de las pantallas de las laterales pero pudo más mi vértigo y saber que si me iba un poco más alto en las tribunas, me cagaba del susto por que esa madre, está alta.

Ahí cuando faltaba más o menos una hora pa' que empezara el escpectáculo, pusieron así figuritas e imágenes en las pantallas gigantes (que pa' efectos prácticos, sirven como si estuvieras viendo tele plácidamente en tu hamaca). Miren nomás, al Adal Ramones intentando animar a la audiencia en lo que aquellos 22 realizaban sus movimientos de calentamiento.



Honestamente, no le entendía yo ni madres al wey, se alcanzaba a medio escuchar "wawawaw waaa weewewwe wawa wawaw wawawa wa weeeeeeee!!!!!" y la gente "eeeeeHHH" y "fi fi fi fi fi!!"... Si eres mexicano, esto último sin duda lo entiendes.

Tristemente, me enfoqué más en ver el juego y lo que ocurría que en tomar fotos. Tenía yo un Walkie Talkie en línea directa con Carrillo quien a su ves le transmitía a Aguirre mis observaciones. Eso negro con las manos abiertas, es la Señora Ochoa quien salió a calentarse un poco antes del resto de los jugadores.


Lo único que no me gustó, fue al momento de la entonación de los Himnos Nacionales. Señores... Compatriotas... Hijos de su chingada... Déjenlos cantar su chingadera por favor, ¿qué no ven que Landon Donovan se encabrona si no canta sus estrofas más preciadas en puritito silencio? Aquí les dejo la letra del himno gabacho que canta Donovan en sus juegos de Fútbol:

"I'm so gay can't you see? by the look that I have

when so proudly I sleep, with a dick in my hands"




Ahí queda constancia de que son unos cabrones... Déjenlo expresar sus predilecciones... Si le gusta el camote, déjenlo ser!!!. Ay cuando quieran les transcribo el himno completito (el de Landon).

Pero a la hora de la gloriosas letras de González Bocanegra y música de Nunó Roca... Ahí si que se me salió mi lagrimita... Snif. ¿Se ve que el niño si ponía atención en la primaria verá?

Ahora... La parte sin bromas y pendejadas.

Sin duda alguna, lo más importante de ir al Azteca, es observar el parado y juego de la Selección sin que algún pendejo (lease Alarcón, Sirviento o el Perro) te esté diciendo que somos muy chingones y que todo mundo nos la pela a la hora de jugar al Fútbol.

No señores, la Selección estaba jugando de su chingada pues no podían encontrar como entrar en la defensa norteamericana. Se la pasaron pendejeando el balón del lado a lado durante los primeros nueve minutos y en una sola descolgada a velocidad con pase del odiado calvo de mierda, nos clavaron el primero.

Sin embargo, el Azteca pesó... Y pesó un chingo. La gente se dió cuenta de que los gabachos solo estaban replegados atrás y que era cuestión de tiempo para que cayera el gol del empate. Los gritos de "México! México!" eran tan fuertes que hasta uno que otro cangrejo que se quedó en C.U. escuchaba con atención los cánticos y las mentadas hacia el gabacho.

Corría el minuto 19 cuando ya me había fastidiado de mentarle la madre y tomé el radio y le dije al Capello "hijo, no mamen... Dile a esos pendejos que si ya tienen el balón y pueden hacer un tiro, que prueben y disparen a gol, la están cagando estos hijos de su madre!!".

Acto seguido, un par de gritos a Israel y el fierrazo que terminó ensartándose en el fondo de la cabaña de Howard.

Dios... ¡Que cosa más hermosa escuchar el rugido del gol en el Azteca!

Y escucharlo con la Selección, no en goles pendejos metidos con dos balones en la cancha...

¿Después? El mismo letárgico toque y toque a lo pendejo lateral sin observar que nadie desbordara...

Llegó el segundo tiempo, la expectativa seguía y yo no dudé nunca en que se conseguiría el gol del triunfo...

Sin embargo, uno de mis asesores quien seguía por TV el juego en la Ciudad de Mérida me mandó un mensaje de texto al celular (el único que consiguió entrar toda la tarde) diciendo "dile a ese hijueputa que meta a Sabah!!". Sin chistar, tomé el walkie-talkie, le menté la madre a Javier y voilá! que me hizo caso y mete al hombre que minutos después de ingresar conseguiría el gol del triunfo después de una gran jugada del Pumita Juárez.

¡Qué cosa más hermosa de nuevo! Apoteosis, éxtasis instantaneo y felicidad... ¡Chingue a su madre la crisis, el narcotráfico y el precio de la gasolina!, ¡Qué chinguen a su madre Ebrard, Encinas, Calderón, Ortega y Peña Nieto!

Y el cielito lindo... Claro está, modificado como la gente:

"Aaaaaaaaaaaay aaaaaaay ay aaaaay... Gringo no lloooreeeees!!!



¡Todos a festejar y a empelotar viejas al Angel!

Yo no fui, me contaron...

Señores... Nuestro fútbol es mediocre y aun tiene mucho camino que recorrer si se quiere llegar a grandes cosas. Se ganó, si... Era una obligación existiendo tantas condiciones a nuestro favor: la altura, el "calor", 100,000 mil almas mentándole la madre a cuanto cabrón pudiéramos y el smog.



No echemos las campanas al viento, como dijo Javier después del juego "hoy ganamos y hay que festejar, pero mañana, vámonos a chambear con más ganas por que esto aun no acaba y tenemos que pensar en Costa Rica".

Se ganó una batalla, pero no la guerra.

Y como buenos combatientes... Después del enorme desgaste de adrenalina, calorías y energillas, que mejor alimento que un buen taco campechano con su respectiva coca-cola:


Lo demás, quedó ya atrás... De nuevo a Tlalpan para tomar el micro y bajarse ahí merito donde mis haters se pueden poner viendo al Zócalo (o sea, en Pino Suárez) para subirse al metro y llegar a descansar.

Por que ganó México y lo demás... Hoy, por un ratito aunque sea... No importa.

Escuchando: Como un lobo; Miguel & Bimba Bosé

No hay comentarios.: