miércoles, 19 de septiembre de 2007

Y ahora que me acuerdo...

Hace 19 años de que mi cuate Gilberto vino a dar la vuelta por estos lares...

Chinga... Diez y nueve años se dicen fácil y caray... ¿Te acuerdas de que andabas haciendo en aquel entonces?

Recuerdo que rumiaba por que el mal tiempo no me permitía salir a jugar con los cuates de la cuadra de aquella casa en Granjas y que tenía que entretenerme jugando canicas en el piso de losa y que valía madre por que cada vez que hacía un tiro mis canicas llegaban hasta de la sala hasta el comedor y pues nada más no se podía hacer ni madre. También tengo en la mente el encabezado del Diario de aquel día que rezaba algo así como que "Un Monstruo de..." no se cuantros kilómetros por hora... Me dormí aquella noche pensando que aquel monstruo sería una bestia peluda de algún tipo que pasaría justo por el Periférico de Mérida y nos asustaría en la noche... Que pequeño era el mundo en esos tiempos, era toda una proeza cruzar un pequeño monte para llegar a ver los destrozos en las luminarias y pantalla del Kukulcán solo para que te regañara tu abuelita y tía por que "a donde vas ninio que hay mal tiempo?"... Que Dios me las bendiga toda la vida.

¿Y hoy?

Hoy el mundo es más grande... Me pregunto si es que acaso no habría sido mejor no crecer y quedarse como niño toda la vida preocupándose únicamente por aprenderse la lección en dos segundos y salir en tu bicicleta con la palomilla... O si acaso ahora te toca soportar a los hijos de otros y preocuparte por que vas a comer y con que billetes vas a pagar la luz...

Pero como dice otro amigo; Es la vida...

Escuchando: Perfect; Smashing Pumpkins

1 comentario:

Tranquilita dijo...

Ahhhh... enfrentar la vida es algo que de pequeños anhelamos pero de grandes detestamos.:(