De la Mosha y sus memorias...

El otro día comentó Enid en el tagboard que mi post había estado muy raro. Creo que se topó con el segundo capítulo de las Memorias de la Mosha y no había tenido chance de explicarle más o menos de que se trataba el asunto.

Normalmente en este pequeño espacio, hacemos fotomontajes satirizando algún personaje famoso con las caras de nuestros pobres amiguitos; como olvidar a Hannibal Herbert, a los Village Huiros o la famosísima marca del diseñador Alexander... Una buena tarde de esas donde veía la cartelera del cine (poco después de los Óscares), me encontré con la película Memorias de una Geisha... mi mente vuela y pone la cara de Mosh (por que vamos, Mosh es casi casi una mujer) y se pregunta ¿cómo quedaría su rostro con labios rojos?... El resto es historia.

Y hasta este entonces, no había desarrollado a mayor escala el tema de cada una de las historias. Es decir, Herbert no se volvió Canibal como para inventar que se pone a devorar hombres; no lanzamos el segundo sencillo de los Village Huiros, y tampoco Alexander salió modelando su línea de lencería gay.

Pero con Memorias de la Mosha, hubo cierto clamor entre los cuates (por no decirles víboras) por conocer como nuestro peculiar amigo había cambiado de sexo y pues, ¿a quien le dan pan que llore? solo necesito que me den un poquito de cuerda para empezar a joderlo al muy pelaná por que últimamente ya ni nos saluda, ni nos pela, ni nos hace caso y lo peor, ya no me da para el gasto. En la trama de las historias están enclavados muchos, pero muchos chistes locales de las múltiples aventuras que aún permanecen ocultas de nuestro buen grupo de amistades; por que aunque parezca que somos muy llevados, al otro día simplemente nos damos un saludo y tan amigos como siempre.

De ahí la extrañeza de los posts de todos los lunes... sé que a Florecita no le gusta leerlos por que está muy grueso, pero pues hay que poner cosas para todos y así como a veces ponemos chascarrillos familiares y tranquilos, de repente se nos sale lo vulgar y mentamos madres al por mayor. Y también tengo que mencionar que mucho de eso es gracias a la creatividad compartida de la Rafaela, la Herberta y la Geovanna quienes me dicen más o menos que ponerle, que quitarle y que modificarle para que quede más a gusto del cliente... al menos ellos si esperan con ansias todos los lunes para ver que pendejadas se me ocurrieron en un nuevo capítulo de las pendejadas del pobrecito Mosh...

Una vez explicado el asunto, puedo reposar en paz por lo que queda del fin de semana ya que no hay pelota para distraerme en las tardes... ni manera... a pensar mañana en a quien vamos a joder...

Status: huevotototototota...
Escuchando: Careless whisper; Wham