miércoles, 22 de marzo de 2006

Teoría Barata

Cavilando por ahí en uno de esos momentos donde no tienes ni madre que hacer pero si mucho que pensar, llegué más rápido de lo que me imaginé a la conclusión que no quería llegar: no entiendo a las mujeres.

Me asombraba yo acerca de la belleza de una chica (ojos verdes, piel blanca y pelo castaño) y dispuesto estaba a acercarme a ella para hacerla partícipe de una idea que involucraba una noche de copas una noche loca, cuando de pronto veo que un sujeto se le acerca por detrás, la toma por la cintura y le dice cosas al oido; muy probablemente su novio o amante o que chingados voy yo a saber.

No voy a compararme con Brad Pitt (vamos, estoy mucho más disponible, pero no es el caso) pero tampoco soy Cuasimodo... el galán de la belleza este era más feo que imaginarse un gremlin correteando por una habitación a oscuras. Con aretes seguramente hasta por el cucu y piercings en el labio y con una cadena cual pachuco en la ciudad de México. No pude hacer más que resignarme y pensar hacia mis adentros "¿acaso tengo que estar tan dado en mi madre para que me hagan caso?".

Es que a las niñas les encanta ese look de chico malo inconsciente de las reglas vale madre con la vida. Y la que no se sienta atraido por un tipo con biker look que tire la primera piedra.

No pude dejar de asombrarme al impactarme de frente con la historia de un par de caricaturas que ejemplifican lo mismo que mis pobres ojitos.

¿Con quien acaba la Bella? pos con la Bestia... que luego se convierte en príncipe y queda a todo dar es otra cosa, bien pudo haberle pasado a Bella lo que le pasó a Jack Black con la Gwyneth Paltrow en Shallow Hal, no le quedaba de otra más que verlo guapo y atractivo y tuvo que imaginárselo así por no volverse loca de lo fea que es la Bestia.



¿Y quien no conoce la mítica historia del sapo y la princesa que al besar al pobre Sapo logrará que este aparezca como un príncipe de pocas pulgas?


Digo, cuentan las malas lenguas que eso mismo fue lo que pasó en Guadalajara con Freddy, pero la verdad es que quien sabe.

Y para no alargar más el asunto, vamos a dejar las cosas que aprendí con esta experiencia hasta aquí por que no encontré más caricaturas. Me enteré que Cuasimodo no se queda con Esmeralda (por pendejo) así que perdí el hilo de las coincidencias. Yo creo que si, efectivamente a las mujeres les gusta hasta cierto punto que las maltraten y que el chico con el que andan tenga un aspectillo medio rebelde... pero no como los putitos esos de la novela, sino unos tipo James Dean que las secuestren de su casa y las lleven a bailar.

¿Qué va a ser de nosotros los chicos normales? ¿me convierto en sapo? ¿me convierto en bestia? ¿me lleno de agujeros y tatuajes por todas partes?. Sepa... pero algo hay que hacer...

Status: y hoy, al Beisbol!
Escuchando: All I want is you; U2

6 comentarios:

FlOr dijo...

Sin comentarios, no pretendo iniciar un debate... demasiadas cosas implicitas. Besos :P

Jorgito dijo...

Jam... como cuales implicaciones habrán?

Flacoman dijo...

A las viejas lo que les gusta es que las traten mal.

He dicho.xnkial

Jorgito dijo...

Y con bate compadre... con BATE!

Anaita dijo...

mmm tu ya eres un principito. no necesitas perforaciones ni rudeza para ser un encanto...

Jorgito dijo...

blush...