miércoles, 15 de febrero de 2006

Bad Timing o Como Romper un Corazón

Seguramente recordarán los graves problemas digestivos sufridos en alguna ocasión por la actitud culera en ese entonces de nuestro noble y tierno Sujeto A. Anoche me topé con un capítulo más que bien puede encasillarse dentro de los anales de mis ya muy curiosas vivencias(anales es usado sinónimo de historias, no me refiero a vía rectal).

Era un 14 de Febrero cualquiera; de esos donde recibes felicitaciones a diestra y siniestra sin que sea tu cumpleaños y donde aun no entiendo si la gente te felicita por que tienes a bien ser su amigo... y luego me dicen ególatra. Transportémonos hasta la sutil y cotidiana existencia de Sujeto A, quien agradecía que ya casi terminaba el mentado día, cuando de repente y de la nada surge Chica C cual estrella fugaz pidiéndole amablemente a nuestro Super Heroe que fuera por ella a su trabajo para hacer alguna cosa cualquiera que tuviera tintes Valentinescos. Valiéndole madre como siempre su descanso en cuanto surge alguna ocasión de estar con sus amigos cuando lo necesitan, Sujeto A cambió la apacible comodidad de su hamaca por unos ratitos de plática y momentos agradables con Chica C. Además sirvió como defensa no planeada pues la Hermanita de nuestro paladín de la vida y otras cosas había invitado a su hogar a una marabunta de mujeres solteras y desesperadas que bien pudieran haber entrado a su habitación y abusar de el mientras yacía indefenso pateando la pared.

Y como en aquella ocasión les conté, el resultado de adicionar A + C resulta casi siempre en una ocasión memorable y ésta, aunque triste mis queridos lectores, no fue la excepción. Sujeto A llegó puntual como de costumbre a la cita, más por razones de trabajo Chica C aun no podía salir y pos ni modo, a esperar un ratito se ha dicho; situación rarísima en nuestro personaje pues usualmente manda mucho a la chingada a cualquier individua del sexo femenino que pretenda hacerle esperar más allá de la hora pactada. Ahora, Sujeto A y Chica C tienen cierta historia... se quieren mucho y son muy buenos amigos, por lo que no hay nada de malo en que un caballero tome por la mano a una chica cuando sienta frío. La problemática se presenta justo en el instante cuando Sujeto E hace su entrada triunfal por la puerta del recinto laboral de Chica C y se queda como de a cuatro preguntándose para si mismo "quien chingados es ese cabrón que anda agarrándola de la mano?".

Uno que es astrológicamente pendejo hasta un grado superlativo, máximo y absoluto, piensa con toda la naturaleza posible que Sujeto E es simplemente un amigo más de Chica C y que pasó nada más por saludarla en ese día como cualquier otra víctima de la mercadotecnia común y corriente. Por si tengo que esclarecerlo más, soy mucho muy distraído y no me doy cuenta cuando me encuentro con una situación extraña. No fue sino hasta que Sujeto E le dice a Chica C que tenía un regalo para ella y que iría por el para entregárselo. Chica C, ante la breve ausencia de Sujeto E, le pide a Sujeto A por favor suba y apague las demás computadoras del cyber. Sujeto A emprende gustoso su nueva tarea y se encuentra con que las maquinitas se encuentran ya en Off e inocentemente pregunta: "pero si ya están apagadas!". Chica C, armada de ese cinismo y manera directa de decir las cosas le responde: "si! pero quédate un rato arriba por que no quiero que te vea aquí este niño!".

Sujeto E regresó y hasta arriba se escuchó la emoción fingida de Chica C al ver que nuestro intento de galán de telenovela le había llevado flores, helado de chocolate y un muñeco de peluche que añoraba con particular ansiedad. Riéndome para mis adentros, entendí hasta entonces la cruda, pinche, culera y cabrona realidad del maltrecho corazoncito de Sujeto E a quien se le ha de haber derrumbado el Universo por entrar a la oficina de su musa y encontrarla de la mano con un Sujeto que hasta donde E sabía, no tenía por que existir.

¿Ya ven cuando de repente sale una plática que no tiene la más mínima intención de continuar? Le dicen small talk en Inglés... nomás es por salir del paso y es cuando no hay mucho de decir. Se me rompió el corazón en los pedazos en que antes ya se habían roto y sentí empatía por el tipo; sentí dolor ajeno, sentí nostalgia pendeja por un momento y tal vez sentí lo mismo que ha de haber sentido otro hijueputa en alguna ocasión cuando andaba cogiéndose a la novia de otro y supo que el otro se enteró... Pero no nos desviemos del tema!

Sujeto E se fue seguramente contando cada uno de los pedacitos de su corazón y sin haber conseguido su objetivo pues muy seguramente pretendía cortejar de manera más formal a Chica C. Chica C le informó a Sujeto A que se había muerto de pena por E, pero que no había pedo! ella no estaba en lo más mínimo interesada en ese tipo y que no había intenciones de andar en serio con nadie. Sujeto E era un acosador, a Chica C no le interesaba y punto. "Que bueno que te vió pues me dijo que ahora había competencia" dijo ante un Sujeto A que dijo para sus adentros pecando de modestia absoluta "bueno, realmente no la tengo con nadie" procediendo al resto de la noche. Lo peor del caso? Chica C salió con Sujeto A mientras sostenía en las brazos los regalos de Sujeto E. Sujeto A quedó como todo un galán mercadológicamente ataviado, pues cualquiera en su sano juicio diría que fue el quien le llenó de obsequios las manos a Chica C.

Moraleja y punto de la cuestión? Para que chingados te enamoras de una mujer? Piénsenlo... y me cuentan si le encuentran uso, objeto o razón...

Status: a alguien más le pasan estas cosas?
Escuchando: El beso y el perfume; David Summers

2 comentarios:

FlOr dijo...

jajajajajajaja, no sé si soy cruel por reirme pero la anécdota estuvo de lo mejor que has redactado. No sé en que año fue, pero quien quita que pronto esos dos anden juntos ; D

Jorgito dijo...

gracias florecita, que amable :)