viernes, 14 de octubre de 2005

El Spirit Beige


Acá para los cuates y todos aquellos que alguna vez dieron una vuelta en el, pueden llamarle El JudaMóvil. De nuevo, por falta de tiempo no tomamos una foto real al papá de todos los autitos, mi Dodge Spirit 1992 color Beige con interiores rojos. Ya platiqué suficiente de por que me gusta ese coche, pero como es que si tenía uno azul acabé comprándome la misma cosa pero de otro color? Pues un buen día Adrianita, mi hermanita menor, me dijo que me compraba el Spirit Aqua y no se lo creí hasta que un día me asentó los billetes peso sobre peso. Había yo hecho un deal para comprarme una Geo Tracker pero resulta que se la desvalijaron al que me lo iba a vender y ya no se hizo el trato, por lo que opté por comprarme uno igual pues no me alcanzaba el dinero para más y me urgía viajar a Cancún pues unas niñas norteñas esperaban impacientemente por Jorgito.

Y así fue, que me hice de mi segundo Spirit, ¿ahora entienden por que vendí 2 veces el Aqua?

Este Autito obtuvo su apodo gracias al ilustre Freddy, el mío no tenía tapones, únicamente los rines de acero que vienen de fábrica; además estaba polarizado de un color negro triple humo de eso donde no ves ni madre de lo que pasa al otro lado y encima de eso, siempre andábamos 4 o 5 tipos feos mal encarados viajando a algún antro de mala muerte, imagínense la picture. Solía decirme que parecía auto de Judicial, y pues la conclusión es sencilla no?. Era cómico que en ocasiones nos tocaban los semáforos todos en verde y pareciera que únicamente había sido por pasar en el JudaMóvil; tiempo después reafirmaría su apodo como el papá de todos mis vehículos por haber participado en una de las aventuras más cómicas de este su humilde servidor; pero la contamos cuando se vaya acercando la época en la cual pasó o se nos acabe el rush de creatividad que nos acompaña por estos días; lo que pase primero.

Mi querido JudaMóvil, aunque bastante descuidado ya, aun vive. Cuando vendí el Aqua, le dejé a Adrianita este, pero como aquella se compró un Chevy poco después, mi mamá se lo compró a mi otra hermanita, Abrilita; quien dice que no tiene suerte pues siempre ha tenido coche pero nunca ha pagado por ellos... en fin. El miércoles pasado lo manejé con un dejo de nostalgia; es poca madre estar en un coche grandote... y el asiento delantero de una sola pieza también es muuuuuuy útil. Los interiores están impecables aun, tal y como los dejé; la máquina desarrolla como siempre pero el exterior anda muy descuidado; yo no sé por que las mujeres nada más le ponen gasolina a sus coches y los arrancan, ni se preocupan por lavarlos y darles el mantenimiento que nosotros los niños sí; a lo mejor es cuestión de machismo y feminismo, pero por favor! pa eso hay lavaderos! Al menos lo veo todas las mañanas, le doy su buena lavada de vez en cuando y lo saludo con una reverencia y mucho respeto agradeciéndole el haberme servido en muchas aventuras.

Status: Sorprendentemente, no tengo sueño...
Escuchando: Soak up the sun; Sheryl Crow

No hay comentarios.: